El diseño gráfico es la forma de expresión plástica bidimensional que mediante procesos de creación visual, de diferentes fundamentos, elementos o factores, satisface determinada necesidad, buscando solucionar problemas para la creación de formas y objetos útiles aplicables a la vida práctica.
Su cobertura es amplia y múltiple. Incursiona indistintamente en la industria, la técnica, la publicidad, las artes gráficas, la comunicación visual, los textiles, la arquitectura, etc., y en cada campo de acción donde se necesite innovar o crear algo de utilidad, funcional y adecuado para lograr determinado propósito. Hoy en día es muy relevante en la Web, en las redes sociales y en general en el Marketing Online.
Los productos del diseño deben preservar la calidad general, especialmente la relacionada con el sentido estético de la forma, el color, el material, etc., y lograr que todos estos elementos sean agradables para el gusto de los usuarios.
A nivel empresarial, el Diseño grafíco se hace presente en su imagen corporativa y publicidad. Las empresas cuyas marcas y logotipos se aplican de modo coherente y consistente salen beneficiadas, porque la personalidad que proyectan al mundo tiene coherencia y consistencia; los consumidores, los proveedores y otras personas ven que la compañía «actúa con armonía», sabe lo que se hace, está bien organizada y es eficiente. A la inversa, una proyección confusa, ilógica y fragmentada de las marcas y logotipos de una compañía daña su imagen.
La Página Web debe llevar concordancia con lo que proyecta una empresa, mejorando el mensaje ya que al estar en la red puede ser vista por el mundo entero. No obstante, está claro que una compañía necesita proyectar algo más que tan sólo una imagen o un mensaje coherentes, estos deben ser apropiados. Por ello, el diseño y la publicidad debe actualizarse de cuando en cuando, lo mismo que los envases, los productos mismos, los métodos de producción, etcétera. Esto es aplicable también a los logotipos y a las marcas. Deben ser revisados y actualizados, porque si no quedan desesperadamente anticuados con el correr de los años.